No esperes que estos besos (que te esperan) te cercenen la piel,
/jamás lo harán/
lloro en el instante preciso
sin basilar, y en el momento cúspide de mi ira
te arranco los mechones de cabello
y gozo siendo un hijo de puta
¿y que importa?
porque ya sabes que desaparecí
soy un fantasma deambulando en el frontis de tu casa, tu antigua casa
… ya no estas
y los manuscritos te esperan junto conmigo
estoy esperando que vuelvas,
pasaré la vida columpiándome, esperándote
es que tal vez no soy tan hijo de puta
tan solo un alma recalcitrante
perdido entre las hojas de aquellos álamos.
y perdí la guerra,
solo tengo heridas
jamás tendré alguna medalla, algún honor
pero me conformo con que arañes mi pecho,
escribe tu nombre
para que por lo menos mis heridas sean mas dignas,
para que la cicatriz me atormente y me alegre al mismo tiempo.
tus entrañas me mataron la ilusión /de alguna forma/
y como fantasma que soy
pregonaré mis lamentos a los perros callejeros
y me columpiaré, esperaré,
porque soy tan solo un alma recalcitrante
perdido entre las hojas de aquellos álamos.
esperaré, aunque ya no vuelvas,
esperaré con los manuscritos,
como fantasma,
con mis llagas de soldado bastardo
lacerado, sin honor.
tan solo para recordar
si es que no quieres arañar mi pecho
permíteme recordar algo que no volverá,
es que soy un fantasma
un soldado bastardo,
mi sino ya fue decidido no se por quien,
permíteme oler tu cuello
tan solo para recordar.
fantasma de columpio, de álamos longevos,
consejeros de perros callejeros
te espero en el frontis de tu casa
lacerado, sin honor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario